El dióxido de carbono (CO2) es el gran enemigo a vencer en la lucha contra el cambio climático. Este gas representa alrededor de dos tercios del calentamiento atribuible a los gases de efecto invernadero, de acuerdo con el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) de la ONU.
Estos son los 15 países más contaminantes del mundo
China y EU, las dos principales economías globales, son responsables en conjunto de casi la mitad del CO2 que se emite a nivel mundial.
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La emisión de CO2 proviene de diferentes actividades humanas, casi todas en realidad, pero la reina de las emisiones de este gas a la atmósfera es el sector energético, este sector emite 68% del total de gases de efecto invernadero, que incluye no sólo la electricidad, sino también la producción de combustibles, el transporte, edificaciones e industria, de acuerdo con el programa de medio ambiente de la ONU.
Pese a los efectos del calentamiento global y a que diferentes organizaciones y expertos advierten sobre los efectos nocivos de no controlar las emisiones de gases de efecto invernadero, estas siguen en aumento, y en 2024 romperán otro nuevo récord de emisiones, a la vez, este año se dirige a ser el más caluroso para el planeta desde que se tiene registro.
De los alrededor de 200 países que hay en el mundo, 15 son responsables del 78% de las emisiones, y sólo dos de ellos emiten casi la mitad de dióxido de carbono de todo el mundo: China y Estados Unidos.
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Aunque no siempre fue así. En 2006, China desbancó a Estados Unidos como el país más contaminante del mundo.
En América, México figura entre los cinco países con más emisiones y pese a que el gobierno ha aumentado su meta de reducción de gases de efecto invernadero de 22% a 35% en 2030, con respecto a su línea base, desde el 2015, año en el que se firmó el Acuerdo de París, las emisiones han aumentado 1% de 479 a 483 millones de toneladas de CO2.
México no es el único país que tiene un reto por delante, la gran mayoría de los países tienen metas poco ambiciosas. De acuerdo con la ONU, la falta de acciones contundentes por parte de los países de ingresos altos, principales responsables de las emisiones históricas, y el incremento de emisiones en países de ingresos medios y bajos, exigen medidas extraordinarias a nivel global.
De acuerdo con el informe sobre la Brecha de Emisiones 2023, si no se logra reducir significativamente las emisiones globales de GEI para 2030, será imposible limitar el calentamiento a 1.5 grados centígrados y se dificultará considerablemente mantenerlo por debajo de 2 grados, por lo que los países deben ser mucho más ambiciosos y adoptar medidas más contundentes en la próxima ronda de Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (CDN), que son compromisos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero que los países presentan como parte del Acuerdo de París.
Estas contribuciones establecen las metas y planes específicos que cada nación implementará para mitigar el cambio climático, adaptarse a sus impactos y movilizar recursos.
Las CDN se clasifican en incondicionales, que son los compromisos que los países se comprometen a cumplir independientemente de cualquier apoyo externo. Y las condicionales, que son los compromisos que los países cumplirán solo si reciben apoyo internacional en forma de financiamiento, transferencia de tecnología o capacitación.
Entre mayor sean los compromisos de los países, y que la aplicación de las medidas sea real, menor será la probabilidad de tener un escenario catastrófico, donde la temperatura del planeta aumente 3 grados centígrados frente a la era preindustrial.
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