El cambio climático es uno de los retos más urgentes y complejos que enfrenta el mundo. Con la llegada de un nuevo gobierno en México, liderado por Claudia Sheinbaum -una experta en cambio climático- se abre una ventana de oportunidad única y con el reloj en contra para enfrentar este desafío con decisión y liderazgo. Es momento de analizar cómo esta administración puede impulsar la acción climática en todos los sectores.
La oportunidad climática del nuevo sexenio
Claudia Sheinbaum ha señalado la necesidad de acelerar la transición energética, destacando que las inversiones deben respetar el medio ambiente y promover el desarrollo social.
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México construyó a lo largo de muchos años una base sólida de política pública para impulsar la agenda climática. Durante el sexenio anterior, uno con señales contrarias al cuidado ambiental, se logró avanzar en el desarrollo de instrumentos de finanzas sostenibles como la Taxonomía Sostenible, un marco que identifica actividades y proyectos con impactos positivos en el medio ambiente y la sociedad.
Las nuevas Normas de Información Financiera (NIF) en materia climática que establecieron son un precedente para una mayor transparencia y estandarización en la divulgación infromación financiera en materia de sostenibilidad y de riesgos y oportunidades relacionados con el cambio climático. Este camino avanzado ofrece una plataforma para que el nuevo gobierno y el sector privado colaboren hacia una economía resiliente y baja en carbono.
Sheinbaum ha señalado la necesidad de acelerar la transición energética, destacando que las inversiones deben respetar el medio ambiente y promover el desarrollo social. En su campaña, se comprometió a invertir 13,566 millones de dólares en transición energética con el objetivo de alcanzar un 50% de energía limpia en la matriz energética para 2030. Además, enfatizó que es posible desacoplar el crecimiento económico del uso intensivo de energía.
La gobernanza climática es clave para enfrentar la nueva realidad climática. Integrar los principios de dicha gobernanza en las agendas de los consejos de admistración y las estrategias de negocio permitirá a las empresas gestionar mejor los riesgos asociados al cambio climático y capitalizar las oportunidades de innovación que surgen de la transición a una economía descarbonizada.
El nuevo gobierno tiene la oportunidad de facilitar y acelerar este proceso, fomentando tecnologías limpias, expandiendo la generación distribuida, impulsando la electromovilidad en las ciudades e impulsando la economía circular para reducir emisiones de gases efecto invernadero. No perder de vista los avances logrados permitirá recobrar el liderazgo de México en la agenda del climática global.
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Claudia Sheinbaum enfrenta un reto que también representa una gran oportunidad: posicionar a México como un líder en acción climática. Este sexenio ya no tiene el lujo del tiempo y debe marcar un antes y un después en cómo el país aborda el cambio climático, aprovechando el compromiso de todos los sectores para garantizar un futuro más justo, limpio y seguro.
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Nota del editor: Jimena Marván Santín esDirectora Ejecutiva del «Capítulo Cero México» de la Iniciativa de Gobernanza Climática del Foro Económico Mundial. Síguela en LinkedIn . Las opiniones publicadas en esta columna corresponden exclusivamente a la autora.
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