El estudio examinó los 6.9 billones de dólares de financiación sindicada de 60 bancos globales a empresas de combustibles fósiles, como mineras de carbón o navieras entre 2016 y 2023, incluyendo préstamos, líneas de crédito y bonos.
"Estamos dando la voz de alarma sobre los bancos y las empresas de combustibles fósiles que blanquean sus finanzas para ocultar cuánto dinero están invirtiendo realmente en combustibles fósiles", dijo Franziska Mager, una de las autoras del informe.
Países Bajos ha introducido reformas para intentar deshacerse de su imagen como vía de flujos de dinero hacia países con tasas impositivas muy bajas.
Un portavoz del Ministerio de Finanzas neerlandés dijo que el país ha hecho mucho para combatir la evasión fiscal, centrándose en los flujos de dinero a través del país y contrarrestando las "estructuras abusivas", lo que ha provocado una disminución del dinero destinado a Estados con bajas tasas impositivas.
La financiación sindicada señalada en el estudio representa una pequeña fracción del crédito bancario total a la industria de los combustibles fósiles, pero los autores del estudio afirman que muestra cómo se oculta todo el alcance de la financiación de los combustibles fósiles.