Otro récord se estableció en el estado brasileño de Mato Grosso do Sul debido a los incendios que devastaron el Pantanal, una de las mayores zonas húmedas del mundo y una vasta reserva de biodiversidad al sur de la Amazonía.
Copernicus estima que los incendios forestales liberaron 176,6 megatoneladas de CO₂ equivalente en 2024 en la Amazonía brasileña.
"Estos incendios tuvieron repercusiones a nivel continental en la calidad del aire, con altas concentraciones de partículas y otros contaminantes que persistieron durante varias semanas", destacó también Mark Parrington.
En el resto del mundo, "Eurasia oriental, incluida la región dentro del círculo ártico, también experimentó emisiones por incendios superiores al promedio", señaló el informe.
En Europa, la temporada de incendios estuvo "cercana al promedio", con algunos episodios destacados en Macedonia del Norte, Grecia y los Balcanes durante el verano, así como en Portugal en septiembre.
En el sudeste asiático, las emisiones, que suelen ser muy altas, "mantienen una tendencia a la baja desde hace dos décadas", a pesar de excepciones en Birmania y Laos, subrayó Copernicus.