La transición energética global se ha ido acelerando, impulsada por la urgencia de alcanzar la descarbonización y la expansión de las capacidades de energía renovable y eficiencia energética. Este cambio presenta tanto retos como enormes oportunidades para los inversionistas que buscan alinear sus estrategias con los criterios de sostenibilidad y así obtener atractivos rendimientos, de acuerdo con el estudio Energy transition investment outlook: 2025 and beyond.
Energías renovables y eficiencia energética, oportunidades de inversión

Comparto los principales desafíos y oportunidades emergentes de invertir en este horizonte dinámico.
1. Retos en el camino hacia la descarbonización
Principalmente, en los sectores energético, industrial y de transporte, existen desafíos significativos:
- Inversión de capital. La transición requiere una inversión masiva en nuevas tecnologías, infraestructura y adaptación de los sistemas existentes. Se estima que la inversión global en energía limpia pudo alcanzar los 2,000 billones de dólares en 2024, superando la inversión en combustibles fósiles. Sin embargo, se necesita aún más capital para cumplir con los objetivos climáticos a largo plazo.
- Incertidumbre regulatoria. La falta de políticas claras, estables y a largo plazo representa un obstáculo para inversionistas, ya que los riesgos regulatorios pueden retrasar o incluso cancelar proyectos, lo que dificulta la toma de decisiones de inversión.
- Complejidad tecnológica. La transición energética implica la adopción de una amplia gama de tecnologías, algunas de las cuales aún están en desarrollo o no se han implementado a gran escala, lo que genera incertidumbre sobre su rendimiento, costos y viabilidad a largo plazo.
- Barreras de implementación. La expansión de las energías renovables se enfrenta a problemas de conexión a la red y permisos, así como a la necesidad de modernizar la infraestructura existente. Además, la escasez de mano de obra calificada y las limitaciones en la cadena de suministro pueden retrasar los proyectos.
2. Oportunidades emergentes de inversión
A pesar de los desafíos, la transición energética ofrece un abanico de oportunidades para inversionistas:
- Energías renovables. La inversión en energía solar, eólica, hidroeléctrica, geotérmica y otras fuentes renovables está en auge, y la capacidad de instalación de cada una ha crecido rápidamente en la última década, por lo que se espera que la tendencia continúe.
- Eficiencia energética. La implementación de tecnologías y soluciones para reducir el consumo de energía en edificios, transporte e industria es fundamental para la descarbonización. La eficiencia energética no solo contribuye a la sostenibilidad, sino que también genera un ahorro en los costos a largo plazo.
- Infraestructura de red. La modernización y expansión de las redes eléctricas es esencial para integrar las fuentes de energía renovable, mejorar la confiabilidad del suministro y facilitar la electrificación del transporte y la calefacción. Esto incluye inversiones en almacenamiento de energía, redes inteligentes y sistemas de gestión de la demanda.
- Tecnologías de descarbonización. El desarrollo y la implementación de tecnologías como la captura, utilización y almacenamiento de carbono (CCUS, por sus siglas en inglés), el hidrógeno verde y los combustibles sostenibles ofrecen oportunidades para descarbonizar sectores difíciles de electrificar, como la industria pesada y el transporte de larga distancia.
- Economía circular. La transición hacia una economía circular, que prioriza la reducción, reutilización y reciclaje de materiales, crea oportunidades para invertir en soluciones innovadoras de ecodiseño, producción sostenible y gestión de residuos.
3. Priorizar los criterios de sostenibilidad
En un horizonte cambiante, aplicar los diversos criterios de sostenibilidad es clave para tomar decisiones de inversión:
- Inversión ESG. Los inversionistas están incorporando criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG, por sus siglas en inglés) en sus análisis y estrategias, pues la demanda de inversiones sostenibles está creciendo, lo que impulsa la asignación de capital hacia proyectos y empresas que cumplen con los criterios.
- Taxonomías sostenibles. El desarrollo que define las actividades económicas que se consideran sostenibles está proporcionando a los inversionistas una guía clara para la toma de decisiones que combatan el greenwashing y garanticen que realmente contribuyan a la transición energética.
- Riesgos y oportunidades climáticas. Los inversionistas están reconociendo cada vez más los riesgos financieros asociados al cambio climático, así como las oportunidades que surgen de la transición hacia una economía baja en carbono. La gestión adecuada de estos riesgos y la identificación de nuevas oportunidades son fundamentales para el éxito de las estrategias de inversión.
La descarbonización, la expansión en el uso de las energías renovables y la eficiencia energética presentan retos importantes, pero también abren un mundo de oportunidades para los inversionistas, pues quienes prioricen los criterios de sostenibilidad, comprendan los riesgos y oportunidades emergentes, y adopten un enfoque estratégico estarán en una mejor posición para obtener atractivos rendimientos financieros, que contribuirán así a un futuro más sostenible.
_____
Nota del editor: Alejandro Pagés es Director de Asesoría en Sostenibilidad, ASG y Economía Circular de KPMG México. Síguelo en LinkedIn . Las opiniones publicadas en esta columna corresponden exclusivamente al autor.
Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión