Parece fácil, pero no lo es, especialmente para las pequeñas y medianas empresas. De acuerdo con Espinosa, “el manejo de información, cómo recabarla, cómo analizarla y cómo sintetizarla, es uno de los puntos de dolor más fuertes (para las empresas)”.
Para lograr un reporte ESG efectivo, lo primero, aconseja Héctor Muskus, director de operaciones de Guardia Consultores, es saber cuál es el objetivo de contar con un informe de sustentabilidad, porque no todas las empresas necesitan reportar, habrá algunas que lo hagan como una buena práctica o porque se lo pide un cliente o para cumplir una regulación, etcétera.
¿Cómo comenzar a hacer un reporte ESG?
Una vez identificado el objetivo, el primer paso para realizar el reporte es “entender cuáles son los aspectos más importantes que tu organización debe gestionar”, explica Muskus. Por ejemplo, si el cliente solicitó el reporte de una empresa probablemente sea para asegurarse de que no tiene trabajo infantil o para conocer cómo está utilizando el agua o la energía. “Al cliente le va a importar lo que puede pegarle reputacionalmente. Entonces, esos factores que afectan a tu cliente te deberían afectar a ti”, señala Muskus.
Sin embargo, uno de los errores más comunes es no entender que el informe de sustentabilidad es también un ejercicio de transparencia. “Muchas empresas tratan de hacer que su informe de sostenibilidad se vea muy bonito en términos de todo lo que hace la empresa y eso para mí es un error porque todas las empresas tienen impactos negativos y si solo habla de lo positivo, para mí es un greenwashing”, comenta Muskus.
Al tener más claridad sobre los objetivos de los informes y las mejores prácticas al realizarlo es más sencillo saber qué información se necesita recabar y qué persona o equipo puede hacerse cargo, dice Espinosa.
El ingrediente final de un reporte ESG efectivo es la capacitación de las áreas involucradas y sobre todo que desde la dirección general sea visto como “una necesidad básica para la resiliencia del negocio”, comenta Espinosa
Ambas personas especialistas coinciden en que el reporte es una estrategia de mitigación de riesgos y puede ser una herramienta para encontrar las áreas de oportunidad de la empresa, que al trabajarlas pueden asegurar su sostenibilidad en el tiempo.