En México, cuando se habla de medio ambiente, el sentimiento que aflora es el de miedo, según un estudio realizado por Latam Intersect Intelligence. De acuerdo con la firma, el 24% de las menciones ambientales en el país están asociadas al miedo, por encima de otras emociones como la expectativa (19%), la tristeza o la ira.
El miedo domina la conversación ambiental en México

La preocupación ambiental en México se concentra en temas como la crisis del agua, los incendios forestales y la contaminación urbana. Estos factores contribuyen a una percepción social marcada por la ansiedad, lo que plantea retos para quienes diseñan estrategias de comunicación y políticas públicas sobre sostenibilidad.
“El miedo es una emoción poderosa y, en el caso de México, parece estar vinculada a problemáticas ambientales concretas. Esto implica que las estrategias de comunicación deben considerar el alto nivel de ansiedad de la población y evitar narrativas excesivamente alarmistas que podrían generar parálisis en lugar de acción”, explicó Claudia Daré, fundadora de LATAM Intersect PR.
En contraste, en Brasil, país que será el anfitrión de la COP30 en noviembre, la emoción dominante es la expectativa, con 32% de las menciones relacionadas al medio ambiente, un sentimiento que se vincula con la esperanza. La disparidad entre las emociones subraya la necesidad de adaptar las narrativas de sostenibilidad al contexto emocional de cada país.
De acuerdo con el estudio, que se basó en más de un millón de puntos de datos recolectados en redes sociales y medios digitales durante los últimos 12 meses, las emociones funcionan como una base para la comunicación efectiva.
“Si en México predomina el miedo, las narrativas deben enfocarse en empoderar, informar y proponer soluciones, en lugar de reforzar la desesperanza”, señaló Daré.