Varias compañías han intentado disimular su falta de acciones concretas con iniciativas supuestamente sostenibles. A principios de mayo, la Comisión Europea investigó a 20 aerolíneas de la región acusadas de “greenwashing”, señalando “acciones u omisiones engañosas” relacionadas con la descarbonización.
Julio Zugasti, experto en aviación de Hogan Lovells, señaló que una política agresiva de descarbonización podría generar disturbios y ser inefectiva a largo plazo. "Probablemente la alternativa a largo plazo llegue a ser implementar de manera paulatina estos ajustes", comentó en entrevista con Expansión.
La introducción de alternativas limpias requiere inversiones cuantiosas, y las opciones actualmente disponibles son limitadas. El SAF, producido a partir de residuos como aceites usados de origen orgánico, tiene el potencial de reducir hasta un 75% las emisiones de CO2 del sector. Sin embargo, según la Asociación de Transporte Aéreo Internacional, la producción mundial de SAF en el último periodo disponible fue de 0.24 megatoneladas, lo que representó solo el 0.1% del volumen total de combustible requerido por la industria.
Esta baja producción, que requeriría inversiones millonarias en infraestructura para incrementarse, se combina con una limitación técnica: los motores de los aviones actuales no pueden procesar SAF puro, sino que requieren mezclas con combustibles fósiles tradicionales.
Juan Cierco, director corporativo de Iberia, resaltó en entrevista con Expansión la necesidad de balancear diversas dimensiones de la sostenibilidad. "Si solo nos fijamos en la sostenibilidad medioambiental, podemos acabar con la aviación si no tomamos las decisiones correctas. Si acabamos con la aviación, acabamos con el turismo", mencionó Cierco en entrevista con Expansión.
Otro obstáculo para la industria es la falta de tecnologías híbridas o electrificadas para vuelos transatlánticos. Aunque fabricantes como Boeing están trabajando en el desarrollo de aviones eléctricos para pasajeros, estos aún están en fase de pruebas y no tienen una fecha prevista para su comercialización.
"Van a tener que pasar muchos más años para contar con aviones híbridos o eléctricos", concluye Cierco, sugiriendo que proyectos como los aviones de hidrógeno podrían estar disponibles alrededor de 2050, pero advirtiendo que la aviación podría enfrentar grandes dificultades antes de llegar a ese punto.
Con información de Ivet Rodríguez.