Todos hablamos de la Inteligencia Artificial (IA): que si va a cambiar el trabajo, que si es peligrosa, que si nos va a facilitar la vida. Pero muy pocas personas están hablando de algo igual de importante: ¿cuánta energía usa realmente la IA? ¿Y qué impacto tiene en el planeta?
La IA puede agravar la crisis energética… o ayudarnos a resolverla

La IA puede ayudarnos muchísimo en temas de sostenibilidad. Por ejemplo, ya se está usando para hacer más eficientes las redes eléctricas, integrar mejor la energía solar y eólica, predecir cuánta energía vamos a necesitar o evitar apagones. También puede ayudar a las industrias a usar menos energía y a las ciudades a funcionar de manera más inteligente.
Pero aquí viene el problema: la IA, sobre todo los modelos grandes como los que generan texto, imágenes o voz, consumen cantidades enormes de energía. Y no solo eso: los centros de datos donde viven estas tecnologías también necesitan agua para enfriarse. En lugares donde ya hay escasez de agua o electricidad, esto puede ser muy preocupante.
En el Foro Económico Mundial de este año, se dijo que el uso de IA generativa podría aumentar el consumo de energía en los centros de datos más de 160%. Y un estudio del investigador Alex de Vries en Países Bajos mostró que, si no hacemos algo, la IA podría consumir más electricidad que toda la minería de bitcoin.
Además, muchas empresas no están siendo claras sobre cuánta energía y agua usan para operar sus modelos de IA. Esto lo señaló la Oficina de Responsabilidad Gubernamental de Estados Unidos (GAO), que también alertó que esto dificulta tomar decisiones responsables desde el gobierno o desde la sociedad.
¿Y qué significa todo esto para México?
En un país donde ya enfrentamos apagones frecuentes, estrés hídrico en varias regiones y una red eléctrica con muchos retos, el crecimiento sin control de la IA podría aumentar la presión sobre un sistema que ya está al límite. Si México empieza a atraer más centros de datos o empresas tecnológicas que usan IA, sin un plan claro, podríamos ver más competencia por la electricidad, mayor uso de agua y una carga extra para zonas donde ya hay escasez.
Por otro lado, si se usa bien, la IA podría ayudar a resolver muchos de nuestros problemas locales: mejorar la eficiencia del transporte público, hacer que las casas usen menos energía, automatizar el riego en el campo, reducir pérdidas de electricidad o planear mejor nuestras ciudades. Pero eso solo va a pasar si se diseña para eso, con enfoque local, y no solo como una copia de lo que se hace en Silicon Valley.
¿Qué necesitamos? Que las empresas tecnológicas usen energía limpia para sus centros de datos, que desarrollen modelos más eficientes y que los gobiernos exijan transparencia en el uso de recursos. También es urgente que se invierta en IA que resuelva problemas reales en México, no solo en entretenimiento o marketing.
La IA no es buena ni mala por sí sola. Pero sí es muy poderosa, y si no la usamos con conciencia, puede terminar siendo parte del problema en vez de parte de la solución.México necesita actuar desde ahora. El gobierno debe trabajar en una estrategia nacional que regule el uso energético de la IA, con lineamientos claros para centros de datos, incentivos fiscales para tecnologías eficientes y sanciones para el desperdicio de recursos.
Las universidades e institutos tecnológicos deben participar activamente en el desarrollo de IA útil y sustentable, orientada a resolver problemas locales. Y tanto el sector público como el privado deben colaborar para garantizar que esta revolución digital no profundice la desigualdad, sino que nos ayude a construir un país más resiliente, justo y sostenible.
____
Nota
Nota del editor: Jessika Slovik H. es Maestra en Derechos Humanos por la Universidad Iberoamericana. Es Fundadora y Directora de Tolerancia Activa. Ha participado en varios conferencias y artículos informativos sobre sostenibilidad para varios medios en México. Creadora y cofundadora de SPEAK ESG podcast trasmitido en Spotify y You Tube. Síguela en Facebook, Instagram y TikTok como @toleranciactiva y en Linkedin y X como Jessika Slovik. Spotify y You Tube podcast Speak ESG. Las opiniones publicadas en esta columna corresponden exclusivamente a la autora.
Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión