Las personas que viven en México ubican ese local, camioneta o triciclo que vende productos para el hogar a granel. Los productos se encuentran en tambos de 100 litros o más y las personas van con sus botellas, que igual pueden ser de refresco, a rellenarlas. Este mercado se encuentra en la economía informal, las personas acuden a él, porque los productos suelen ser más baratos, aunque normalmente la calidad es inferior a las “marcas originales”. El mercado es apetitoso para las empresas, pero hasta ahora no habían podido llegar a él. Es aquí donde entra Mercado Circular.
Mercado Circular expande su modelo de economía circular a México
Mercado Circular es una empresa que promueve la reutilización de envases con máquinas que permiten rellenarlos con productos de diferentes categorías, como shampoos, jabones o croquetas.
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Mercado Circular nace como una división de Demaria, una compañía chilena con más de 120 años de historia en el sector de productos de aseo. La compañía ha desarrollado un sistema que promueve la reutilización de envases con máquinas que permiten rellenarlos. Estas máquinas, además de rellenar los productos, mantienen una trazabilidad completa, permitiendo a las empresas saber cuántas veces un envase ha sido reutilizado.
Paolo Mazza, CEO de Mercado Circular, explica que su modelo de negocio se basa en la premisa de eliminar los residuos a lo largo de toda la cadena de valor. Para el directivo, el problema de los residuos proviene de un "error de diseño", ya que, históricamente, las empresas no consideraban la generación de desechos al desarrollar sus productos. "Cuando los desechos empezaron a ser un problema, la solución que encontró el mundo fue ver qué hacer con la basura”, dice Mazza. Y se planteó el reciclaje, que “se ha planteado como la solución y en realidad juega contra la solución real”, ya que las empresas se limitan a crear empaques reciclables, en lugar de diseñar productos que no generen residuos.
Las máquinas de refill pueden usarse en un sin fin de productos, como de belleza personal, cuidado del hogar, alimentos para mascotas, etcétera. Al rellenar los envases no solo se reduce la generación de residuos, también se disminuyen las emisiones por la producción de esos empaques y se ahorra agua, ya que para hacer el plástico de una botella se requieren 20 litros de agua, mientras que para lavar una botella de tres litros se necesitan apenas 150 mililitros de agua.
“Lo que hacemos no es vender máquinas, sino asesorar para que todo el proceso sea circular de verdad. Ayudamos a definir cuál es el tipo de máquina que necesitan y lo que quieren que haga la máquina, porque la máquina puede hacer muchas cosas”, asegura Mazza.
Mercado Circular ya cuenta con operaciones en Chile y en agosto de 2023 inició en México con un proyecto piloto con Procter & Gamble (que tienen marcas como head & shoulders, Pantene y Herbal Essences) en el Sam's Club de Santa Fe. En este proyecto, se desarrolló una máquina que permitió a los consumidores rellenar envases de cuatro marcas de shampoo. "El piloto fue exitoso, y ahora estamos viendo cómo escalarlo a más puntos de venta", cuenta el directivo quien señala que el objetivo es tener entre 25 y 30 puntos de venta adicionales entre diciembre y marzo del próximo año.
En México, el mercado presenta una oportunidad única para Mercado Circular debido a la costumbre de comprar productos a granel, algo que está prohibido en varios países de Latinoamérica. Además, por un lado, les da la oportunidad a las personas de tener hábitos de consumo más responsables (porque no generan residuos) y también les permite ahorrar, pues son productos que se venden más baratos. "El 80% de nuestros clientes llegaron motivados porque el producto era más barato, mientras que el 20% lo hizo por razones de cuidado ambiental", comenta Mazza. A su vez, las empresas se aseguran de que los productos mantengan su calidad y se presenten de manera correcta al consumidor.
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