A la par, el Programa de Observación de la Tierra de la Unión Europea, Copernicus, en 2024 pero también en el promedio de los dos años 2023-2024 se superó 1.5 grados centígrados de calentamiento en comparación con la era preindustrial.
Esto no significa, sin embargo, que el límite más ambicioso del acuerdo de París, que se entiende durante al menos 20 años, se haya cruzado, recuerda Copernicus. Pero "esto subraya el hecho de que las temperaturas globales están aumentando más allá de lo que los humanos modernos han experimentado". De hecho, el calentamiento climático actual es sin precedentes en al menos 120,000 años, según los científicos.
"Hemos tenido un anticipo de un mundo a 1.5 grados con sufrimientos y costos económicos sin precedentes para las personas y la economía global, debido a eventos extremos reforzados por la actividad humana, como sequías, inundaciones, incendios y tormentas", declaró a la AFP Johan Rockström, director del Instituto de Potsdam para la Investigación del Impacto Climático (PIK).
Detrás de estas cifras ya se esconde una serie de desastres exacerbados por el cambio climático: 1,300 muertos en junio durante olas de calor extremo durante la peregrinación a La Meca, inundaciones históricas en África y en España, huracanes violentos en los Estados Unidos y el Caribe, entre otros.
En términos económicos, los desastres naturales causaron 320,000 millones de dólares en pérdidas en todo el mundo, según la reaseguradora Munich Re.
Contener el calentamiento a 1.5 en lugar de 2 grados, el límite superior del acuerdo de París, permitiría limitar significativamente sus consecuencias más catastróficas, según el IPCC, el panel de expertos en clima de la ONU.
"Cada año de la última década es uno de los diez más cálidos jamás registrados", alerta Samantha Burgess, directora adjunta del Servicio de Cambio Climático (C3S) de Copernicus.
Alerta de altas temperaturas en los océanos
Los océanos, que absorben el 90% del exceso de calor provocado por la humanidad, también han continuado su sobrecalentamiento, alcanzando también un récord el año pasado.
El promedio anual de sus temperaturas de superficie, excluyendo las zonas polares, alcanzó el nivel sin precedentes de 20.87° C, batiendo el récord de 2023.
Además de los impactos inmediatos de las olas de calor marinas en corales o peces, este sobrecalentamiento duradero de los océanos, el principal regulador del clima terrestre, afecta las corrientes marinas y atmosféricas.