Publicidad

Orbia, la mexicana que pasó de fabricar cables a ofrecer soluciones sostenibles

La compañía mexicana consolida su evolución con una estrategia que pone la sostenibilidad en el núcleo de sus decisiones y la gobernanza como base de su ejecución.
mié 05 noviembre 2025 08:04 AM
Tania Rabasa-Orbia.jpeg
Tania Rabasa, directora de Sostenibilidad, vicepresidenta de Asuntos Corporativos global y presidenta de Orbia México. (Foto: Cortesía)

Orbia nació en 1953 como Cables Mexicanos, una empresa dedicada a la venta de cables de acero. Setenta años después, aquella firma local se ha convertido en una multinacional con operaciones en más de 40 países, presencia comercial en más de 100 y un equipo de 23,000 colaboradores. En 2019, la compañía dio uno de los pasos más significativos de su historia: dejó atrás el nombre Mexichem y adoptó el de Orbia, reflejando no solo una expansión geográfica, sino una transformación profunda en su propósito y modelo de negocio.

“Más que dar un gran giro, hubo una transformación importante en la empresa”, explica Tania Rabasa, directora de Sostenibilidad (CSO), vicepresidenta de Asuntos Corporativos global y presidenta de Orbia México. “De vender productos pasamos a ofrecer soluciones que resuelven problemas sistémicos. Soluciones para la vida”.

Publicidad

La evolución de Orbia no se limitó a un cambio de nombre o de portafolio. Se redefinió sobre un propósito corporativo claro: “impulsar la vida alrededor del mundo”, con valores como la valentía, la transparencia y la innovación. Este propósito, dice Rabasa, “es nuestra estrella del norte. Ayuda a que todos los días las 23,000 personas del equipo digan cuál va a ser su granito de arena en este propósito”.

En 2012, la empresa fue incluida en el índice S&P/BMV Total Mexico ESG Index, que agrupa a las compañías con mejores prácticas ambientales, sociales y de gobernanza en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV). En los últimos 10 años, este índice registra un rendimiento anualizado de 4%, un punto porcentual por encima del S&P/BMV IPC, el índice que engloba las empresas más grandes de México, lo que refleja que la sostenibilidad y la rentabilidad ya no son conceptos opuestos.

Para Rabasa, esta visión es parte del ADN actual de Orbia. “Buscamos ser totalmente transparentes en nuestro avance hacia este propósito. Tenemos métricas puntuales en ámbitos ambientales, de personas y financieros. Hay años en los que tenemos reveses y otros en los que subimos, pero lo que nos importa es ser transparentes en cómo vamos avanzando”.

Ese compromiso está plasmado en su marca, un conjunto de círculos imperfectos que son el resultado de un gráfico radial basado en seis indicadores claves en términos ambientales, sociales y de gobernanza.

“Si los círculos fueran perfectos, habríamos alcanzado la perfección en todo. Esa es la aspiración: avanzar hacia ser mejores en los distintos ámbitos que medimos”, dice Rabasa.

A nivel global, Orbia participa en industrias que son clave para los retos del siglo XXI: infraestructura, agricultura, materiales, telecomunicaciones y energía. Según el Banco Mundial, estas áreas concentran más del 70% de las inversiones globales necesarias para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) hacia 2030. Por ello, la transformación de empresas con alcance multinacional, como Orbia, representa un eslabón esencial en la transición hacia economías más resilientes.

Rabasa dice que la sostenibilidad no es un área separada del negocio, sino el vehículo que convierte el propósito en acción. “No es algo aparte, está en el centro del negocio y a lo largo de toda la cadena de valor. Buscamos que esté embebida en las operaciones, en las soluciones y en las inversiones”.

Esa integración se sostiene en una estructura de gobernanza robusta, que es fundamental para que el propósito y los valores de la empresa no se queden en la pared, en palabras bonitas, comenta la ejecutiva.

Publicidad

Algunas de las prácticas para fortalecer la gobernanza e involucrar al consejo de administración y a la alta dirección es la presentación trimestral de los avances en materia ESG y capacitaciones en sostenibilidad.

Además, a partir de 2024, Orbia incluye indicadores de circularidad y soluciones sostenibles dentro de su plan de incentivos a corto plazo, con el objetivo de alinear la remuneración del personal con los avances ESG.

“Eso da mucha mayor claridad de hacia dónde queremos avanzar como equipo y acelera procesos porque ya no estamos discutiendo cosas en el aire. Es transparencia y claridad”, comenta Rabasa.

Pero no todo se trata de metas, para la ejecutiva es vital mantener la ambición de esos objetivos. “Si te fijas metas muy cómodas, no estás retando a la organización. Si no se logran todas, también puede ser una buena noticia, significa que te fijaste una meta tan ambiciosa que te acercaste casi al 100%. Hay que juzgar en términos de la ambición, no solo del cumplimiento”.

De acuerdo con el Pacto Mundial de la ONU, más del 70% de las empresas globales considera que los temas ESG son determinantes para su resiliencia a largo plazo, pero solo una de cada tres ha logrado integrarlos en su modelo operativo. Orbia busca estar en ese grupo de vanguardia, con una estrategia que combina visión de negocio, impacto social y disciplina financiera.

Para Rabasa, el secreto está en la coherencia: tener un propósito, pero también resultados que lo respalden. “Se empieza por tener un propósito y unos valores que no se queden en bonitas palabras. Por un compromiso muy transparente del consejo, del CEO y del equipo de liderazgo. Por tener lineamientos y procesos claros. Y también por dar resultados. Nuestra cultura se puede resumir en una frase: nuestro propósito nos guía y nuestros resultados prueban”.

Orbia, que alguna vez fue una compañía enfocada en materiales industriales, hoy se posiciona como un actor relevante en la transición hacia una economía sostenible. Su modelo de negocio combina innovación, circularidad y una gobernanza sólida que permite traducir sus valores en acción.

“Lo que buscamos es inspirar a más empresas en este camino de sustentabilidad, resiliencia y rentabilidad. Queremos demostrar que la rentabilidad y la sostenibilidad no están peleadas. Más bien, son inseparables”, dice Rabasa.

Publicidad

Tags

MEXICHEM, S.A.B. DE C.V. Gobernanza

Publicidad