Las empresas que desarrollan tecnologías para combatir el cambio climático se denominan cleantech, greentech o climate tech. Aunque a veces estos términos se usan indistintamente, tienen sus diferencias.
Las firmas de tecnologías limpias (cleantech) se centran en reducir la contaminación y las emisiones de los procesos industriales y la generación de energía tradicionales, buscando mejorar los sistemas existentes para que sean más sostenibles. Las empresas de tecnologías verdes (greentech) se refieren a cualquier tecnología diseñada para beneficiar al medio ambiente, buscando mitigar o revertir los efectos negativos de las actividades humanas. Y las compañías de tecnologías climáticas (climate tech) se enfocan específicamente en reducir las emisiones de gases de efecto invernadero o mitigar los efectos del calentamiento global, abarcando productos y servicios que tienen un impacto directo en las emisiones.
En el caso de las cleantech, la ONU señala que estos emprendimientos desempeñan "un papel fundamental en la acción climática, ya que apoya la transición hacia economías sostenibles y, al mismo tiempo, crea empleos verdes. Las pequeñas y medianas empresas (Pyme), que son los motores del crecimiento y la innovación, pueden liderar esta transición desarrollando tecnologías, productos y servicios de vanguardia”, indica un reporte de la ONU.
Según un reporte de Cemex Ventures, las áreas que han sido trabajadas por las cleantechs incluyen: energías renovables (solar, eólica, hidroeléctrica, geotérmica), tecnologías de eficiencia energética (LED, bombas de calor), vehículos eléctricos e híbridos, sistemas de reciclaje y gestión de residuos, captura y almacenamiento de carbono, agricultura sostenible y tecnologías de riego eficientes, materiales sostenibles y reciclados, y tecnologías de purificación y tratamiento de aguas.
El Fondo Monetario Internacional (WEF) destaca la creciente importancia de las tecnologías limpias para combatir el cambio climático y alcanzar los objetivos del Acuerdo de París. El organismo señala que la rápida expansión de estas tecnologías, impulsada por su potencial para reducir emisiones y fomentar el crecimiento económico ha intensificado la competencia global por el liderazgo en este sector.
Tesla, Vestas, SunPower, Siemens Gamesa y Ballard Power Systems son algunas de las grandes empresas que se consideran líderes en tecnologías limpias, con un enfoque en vehículos eléctricos, turbinas eólicas, paneles solares y pilas de combustible, respectivamente.